REDACCION. M. Recio. suiteinformación.- Sánchez tendrá que salir del armario. El resultado poco convincente de estas Elecciones Generales colocan al partido mayoritario perdedor, PSOE como posible ganador si consigue reeditar el pacto Frankenstein. Con total seguridad lo intentará su líder, satisfecho con el resultado de su estrategia al fijar la fecha un 23 de julio, lo que ha provocado un 30% de abstención y la confirmación de que su política ha satisfecho a su electorado regalándole unos diputados más. Algo incomprensible para millones de españoles pero ahí esta el resultado. Muy fino tendría que hilar Núñez Feijoo para, habiendo sido su partido el ganador, conformar un pacto que le permitiera formar gobierno.
La clave va estar una vez más en el PNV. El Partido Nacionalista Vasco está en declive. El blanqueo de Bildu le hace retroceder en votos pues los independentistas están más en esa línea dura y radical que en la de imagen tranquila del PNV. El electorado peneuvista es conservador y es más lógico estar al pairo de un gobierno de corte liberal conservador que andar pegados a la serpiente que puede terminar por engullirlos. Todo dependerá de la velocidad con que se alcance un hipotético acuerdo de gobierno entre PP, VOX, UPN y CC.
El posible acuerdo con los vascos no sería complicado. Con Junts no hay que contar. Peor aún, le va a resultar componer a Sánchez el monstruo político muy vivo de Frankenstein. Será dolorosa la negociación porque tanto Esquerra Republicana de Catalunya como Bildu van a reclamar contraprestaciones hasta ahora sólo insinuadas. Ya conocemos la capacidad de contorsión de Pedro Sanchez pero un apoyo sin fisuras al rompimiento de la unidad de la nación podría traer gravísimas consecuencias para todos y principalmente para él al que le exigirán para gobernar otros cuatro años hasta bajarse los pantalones y …. una salida del armario en toda regla. M.R