Fue el primer cuerpo de policía nacional en Occidente. Creada por los Reyes Católicos en 1476 con el objetivo de mantener el orden público en todos los territorios de la Corona.
Los bandos de la nobleza dividida entre los Reyes Católicos y Doña Juana y la guerra con Portugal habían propiciado un ambiente de libertad salvaje. Nadie sentía temor a la justicia y creciendo el número de malhechores con la seguridad de la impunidad, creaba un desconcierto en la población.
Se instituyó aunque existían antecedentes en el siglo XIV, pues los concejos y las villas fundaron las primeras Hermandades de hombres armados con carácter local o regional con intención de proteger los campos, ferias y rutas comerciales de los ataques de bandoleros y moros en tierras fronterizas. Así operaban conjuntamente las hermandades viejas de Toledo,Talavera y Villa Real.
Se creó inicialmente como un instrumento para garantizar el orden público y acabó por convertirse en el germen de un ejército regular, que tuvo valerosas acciones en la Toma de Granada. Se podría decir que se trataba de un auténtico Ejército Real.
Instituida la Santa Hermandad fueron aprobadas las ordenanzas por los reyes Católicos en las Cortes de Madrigal en 1476.
Según Hernando del Pulgar, los Reyes acordaron llamar a Cortes «para dar orden en aquellos robos e guerras que en el reino se facían»
«En aquellos tiempos de división (escribe Hernando del Pulgar) la justicia padecía, e no podía ser ejecutada en los malhechores que robaban e tiranizaban en los pueblos, en los caminos e generalmente en todas las partes del reino. E ninguno pagaba lo que debía, si no quería: ninguno dejaba de cometer cualquier delito: ninguno pensaba tener obediencia ni subjeción a otro mayor. E ansí por la guerra presente como por las turbaciones e guerras pasadas del tiempo del Rey D. Enrique, las gentes estaban habituadas a tanto desorden, que aquel se tenía por menguado que menos fuerzas facía. E los cibdadanos e labradores e homes pacíficos no eran señores de lo suyo, ni tenían recurso a ninguna persona por los robos, e fuerzas e otros males que padecían de los alcaides de las fortalezas e de los otros robadores o ladrones. E cada uno quisiera de buena voluntad contribuir la meitad de sus bienes por tener su persona e familia en seguridad”
Los Reyes Católicos crearon todo un sistema legal “y al menosprecio de las leyes, el propósito deliberado y la firme resolución de hacerlas guardar y cumplir a los grandes y pequeños”
Alonso de Quintanilla, contador mayor de cuentas del Reino, fue el encargado de reorganizar la Santa Hermandad por elección de los Reyes Católicos, y como resultado de la junta general de la misma, celebrada el 15 de Enero de 1488, organizó levas cuya fuerza se elevó á diez mil infantes, y entre ellos se eligieron trescientos espingarderos y setecientos piqueros. Se dividió este cuerpo en doce capitanías.
Había además un capitán general, un alcaide , un contador y un tesorero que junto con las plazas de las 12 compañías constituían las 10.000 plazas aprobadas. Los cuadrilleros, cabos de escuadra, tenían á su cargo, como subalternos de los capitanes, la instrucción, policía y disciplina , tanto en los aposentos y campos como en las marchas y orden de combate.
El traje de los soldados de la Hermandad era muy sencillo. Consistía en calzas de paño rojo, en un sayo de lana blanca con manga ancha, y una cruz roja en el pecho y espalda; cubrían la cabeza con un casco de hierro batido, pero ligero, y su armamento se reducía a la lanza y a la espada pendiente del talabarte.