¿Qué es lo que lo impulsa a seguir?
¿Tú sabes lo que es vestirte de torero?
¿Ponerte un traje de luces?
¿Ir andando en un patio de cuadrillas?
¿Llegar al tercio? ¿Hacer el paseíllo?
¿Pasar ese miedo? Esa incertidumbre
de ponerte delante de un toro,
expresar tu corazón a través de una
de las artes más bellas del mundo
y crear arte en movimiento?
Eso es lo que vale la pena,
¡Vale la pena cualquier esfuerzo
con tal de que el corazón sienta eso
y, lo que no te mata, te hace más fuerte!”

“No vengo a dar lástimas a nadie,
vengo a jugarme la vida a carta cabal”
“Las cornadas me quitaron movimientos
que eran naturales, no porque hiciera mal las cosas,
sino que mi nueva condición me obliga
a hacer todo más puro, con naturalidad
y el toreo no es otra cosa que eso,
naturalidad; entonces,
cada muletazo que logre
será para mí una batalla ganada,
hecha con el corazón
y una sensibilidad plena”
“Más cornás da el hambre”
Los toreros se recuperan tan rápido

de las embestidas del toro
que parece que están hechos
“de otra pasta”. El secreto
está en la fortaleza mental.
Sus cuerpos están cosidos de cicatrices y,
en cada nueva cogida, el pronóstico
vuelve a ser grave. Sin embargo,
es asombroso el escaso tiempo
que los toreros necesitan para recuperarse,
cómo salen del hospital con su mejor sonrisa
y vuelven al coso para seguir con la faena.
“Los toreros son personas muy mentalizadas
en su profesión, están deseando
volver a los ruedos
y eso facilita su recuperación”
El torero representa
uno de los últimos héroes verdaderos
y humanos que nos quedan,
no obstante de su condición mortal.
Cada tarde salen a jugarse la vida.
Arriesgan todo para ganar, por convertirse
en figura de la fiesta brava.
El torero está dotado por la naturaleza
de ciertas cualidades particulares indispensables
al torero como son: valor, ligereza y
un perfecto dominio y conocimiento
de su profesión; las dos primeras
nacen con el individuo, la última se adquiere.
«Lo permanente e invariable de las cosas»
es la esencia del toreo, lo que en él
es permanente e invariable.

En su esencia, el toreo es un encuentro
entre el hombre y el toro bajo forma de lidia,
en el cual hay desafío, juego,
ostentación del poderío humano y muerte real
(la del toro) o muerte posible (la del torero);
por tanto, es un drama. Esto es en el toreo
lo esencial y perdurable, desde que comenzó
a ser lo que hoy es, y aun desde antes.
«Un paso adelante y puede morir el hombre…
Un paso atrás y puede morir el arte».
«El toreo no es graciosa huida
sino apasionada entrega».
Fiesta que muestra sus dos caras:
la del triunfo y la de sangre.
La Tauromaquia es tan bonita que,
cuando menos te lo esperas,
y gracias a su esencia,
te reconcilia con un espectáculo único.
La verdad del toreo y cuando
hay verdad en el ruedo,
hay emoción en el tendido.
Y esa verdad, esa autenticidad,
es la esencia y el pilar
sobre el que se debe asentar la fiesta.

Una lección de toreo auténtico y eterno…
Viva por siempre la más bonita
y auténtica de todas las fiestas…
Viva por siempre la Tauromaquia…
«La Tauromaquia
es la pasión que nos une…»
Hagamos de éste 2022
el año más Taurino
a pesar de las adversidades…
Felipe de Jesús Estrada Ramírez.
Cronista de la Ciudad…
Fraseología Taurina: Manuel García El Espartero, Arturo Macías El Cejas, Pepe Alameda, Máximo García Padrós, Ignacio García Campos, Alejandro Martínez, cultura popular…