REDACCION. M.Recio. suiteinformación.es.- La vida pasa y por mucho que hayas vivido en lo bueno y en lo peor, con los años ya vencidos, tienes la sensación de que es demasiado corta. Lo mejor estriba, porque nos hace buenos o muy malos, en no conocer el momento en el que te despides de todo y de todos.
El adiós te puede sorprender desarrollando tus quehaceres diarios, o de un día para otro como le ha ocurrido a Pepe Domingo Castaño a quien no tuve el gusto de conocer pero que, a través de amigos comunes, sé de la enorme talla personal que atesoraba.
Su “Hola!!!Hola!!!”en cada apertura del programa deportivo “Tiempo de Juego” de la cadena COPE, sonaba como un chorro de ímpetu alegre, una bocanada de aire fresco que iba más allá de lo meramente informativo, sobrepasando incluso las fronteras del fútbol para tocar esa gloria reservada a un puñado de profesionales elegidos. Transformaba en arte hasta su forma de anunciar y lo hacía con gracia y alegría a partes iguales. Un maestro que se nos fue. Descanse en paz. Le echaremos mucho de menos.
Siento una enorme admiración por aquellas personas que mueren en activo. No les importa ni su edad ni su estado físico. Siguen al pie del cañón y mueren con las botas puestas, al igual que el general George Armstrong Custer, oficial del Séptimo de Caballería del ejército USA, fallecido en la batalla de Little Bighorn en 1876, haciendo lo que le habían encargado que no era otra cosa que vencer a las fuerzas combinadas de las tribus indias Lakota,Cheyennes y Arapajó. Vencieron los que siempre pierden en las películas, al mando de Caballo Loco y Toro Sentado. Custer murió y se convirtió en un ícono norteamericano y los indios, en poco tiempo, recluidos en reservas.
Ahora, en 2023 a los españoles nos toca hacer de indios. Estamos gobernados por una especie de sultán atrapalotodo, a quien al parecer, le va más la guerra que la paz, empeñado en perpetuarse en el poder a toda costa y caiga quien caiga y lo que caiga. Por supuesto todo ello al frente de un gobierno “progresista” y por bien de todos los españoles. Un dechado de generosidad y desprendimiento. España es una nación rica en diversidad. La muestra puede encontrarse en su folclore. Cada pueblo, cada ciudad, provincia o región autónoma tiene su propia forma de expresar su tradición, a través de canciones y su forma de vestir, como traje típico, reservada para sus celebraciones más populares.
Es hora de demostrar que la diversidad va más allá de las lenguas cooficiales, pues rebasa la frontera del lingüismo castellano, vascuence, valenciano, catalán o gallego. Una forma de hacer patente lo aquí expuesto consistiría en que todos, sin excepción, los diputados de PP, VOX, CC y UPN asistieran al próximo pleno de la Camara Baja, ataviados con el traje regional de cada circunscripción electoral por la cual fueron elegidos. Sería un magnífico golpe de efecto ver a Nuñez Feijóo con su monteira, a Elias Bendodo y Ricardo Tarno con sus sombreros de ala ancha, a Santiago Abascal con su boina y a Marta Rivera vestida de chulapa. Aún sonando a broma, esta idea está circulando por las redes sociales y creo que es una magnífica aportación que sin duda alguna tendría resonancia y significaría un toque de atención importante ante la opinión pública que tan falta está de motivación. Adelante mis valientes.
Todo sea por la solución final para este gobierno que nunca debería de haber dejado de ser provisional.
Ánimo. M. Recio.