Manuel Recio Abad. suiteinformación..- Este gobierno no deja de producir noticias a diario y por desgracia, ninguna buena. Pedro Sánchez es una máquina de generarlas. Es como una garrapata sociopolítica en acción continua. La última trata sobre la presunta prevaricación cometida, ni más ni menos que por el Fiscal General del Estado el Sr. García Ortíz, cuyo hecho sería impensable, un claro delito de revelación de secreto, salvo que mediara una orden o sugerencia de un superior jerárquico y como bien dio a entender Sánchez en directo: “De quien depende la fiscalía?” . Pues eso. Orden dada a la fiscal Lastra. Un delito de libro y el Código Penal lo es. Cuando el sentido común y la ética son apartados de la mente humana, casi todo lo que se hace conculca seriamente el ordenamiento jurídico y así se va rebasando todos los límites a la irresponsabilidad.
Quien afirma querer despolitizar la judicatura sólo pretende controlarla y por lo tanto politizarla a su manera situándola bajo su control, porque ya le conocemos y sabemos como se las gasta. Esa posición sí provocaría una situación de auténtica canonjía de carácter civil, una prelatura circunscrita a un territorio concreto que daria al traste con cualquier atisbo de valores democráticos.
Una vez estuvieran los tres poderes en una sola mano, sólo faltaría conquistar el alto mando del ejército. Esa figura hoy recae sobre SM el Rey Felipe VI pero…. después de lo sucedido en el parlamento navarro, acordando la reprobación de la monarquía con el voto favorable del PSOE….jaque al Rey.
Para esta pandilla de arribistas que hoy nos gobierna la soberanía nacional no corresponde al pueblo español, a todos los ciudadanos. Tratan de imponer la falacia de que es en el Congreso de los Diputados, ni siquiera en Las Cortes Generales, donde reside esa soberanía. Esta verdad bastarda repetida un millón de veces al más puro estilo goebeliano, certifica cuál es la peligrosa realidad de la política española. Estamos ante una dictadura disfrazada de democracia. El pueblo callado y a lo suyo, haciendo bueno lo de ande yo caliente y ríase la gente. Esto es así desde hace siglos y dejar todo en manos de los políticos nos ha traído fatales consecuencias.
Pero no aprendemos….