Paloma Postigo Pérez. Suite Información.– Todos los seres vivos tenemos el derecho a estarlo, como no.
El derecho a la vida no se niega a nadie. Una avispa que está viva y tiene sed, busca la humedad o el goteo. Si estás cerca, lo mejor es dejar que se hidrate y siga su camino. Entender que para ellas es algo necesario y que tú le importas un comino, que no eres tan interesante como para que te pique, hará que ambos sigáis disfrutando el momento sin dramatismo.
Parece ser que el veneno de la avispa puede tener beneficios para la salud, más razón para que sigan existiendo, pero la picadura duele, y eso es innegable.
Yo, que soy muy de proteger a los animales, casi más que a algunas personas, tengo avispas cada día alrededor de mi piscina, todas ellas buscando hidratarse. Son tan fieles a venir que tiendo a ponerles nombres y si alguna cae al agua corro a sacarla de inmediato. Ellas y los zapateros (libélulas de andar por casa) vienen a convivir en lo que considero mi espacio, ése que cuido y pago religiosamente y beben en mi piscina, a la cual pongo depuradora, cloro, antialgas, lucecitas , y no sé cuántas cosas más.
Yo no pongo ,ni puedo poner límites, fronteras, para que no entren en mi territorio, pero … que no me piquen porque si caen a la piscina no podré salvarlas, por el dolor que me ha producido su picadura.
Así pues, podemos coexistir con respeto, pero, si sobrepasas los límites de la convivencia, tendrás que buscar otro lugar para irle picando a otros que lo permitan, porque aquí no te lo permitiremos.
Al menos, espero que estemos más avispados y así sea,…. Por Dios!
Avispado: vivo, listo, sagaz. (RAE).