Xavi Altamirano. suiteinformación.- Si, a tu padre a Playbol o a Anchuras, que igual está allí meditando si su hijo es tonto porque sí, o es un «PAYASO».
Opinar sobre este desastre vergonzoso que estamos viviendo, es complicado. A estas horas están las plumas privilegiadas de los opinadores de este País y muchos más echando fuego; pero me lo voy a permitir con mi pluma «barriobajera».
Este tío, es un ridículo narcisista con complejo de superioridad, que se permite el lujo de tomarnos el pelo a los españoles.
Me voy cinco días a pensar ¿qué?, ¡No tienes lo que hay que tener!, El día que no vivas en Moncloa, no serás nadie; pero además no podrás pasearte por ningún sitio sin que te abucheen, durante toda tu vida, y los halagos de tus mamanabos incondicionales — con la adoración propia de una Corea del Norte — ya no los tendrás.
Mi opinión es solo eso, una opinión, pero no he apostado por ella, porque mi padre me aconsejó sabiamente «Xavito, tú porfía todo lo que quieras, pero no apuestes». Llevo diciendo desde la cartita cursi, que este elemento no se va ni con agua hirviendo, que lo único que esta haciendo con este invento de “me retiro a meditar” es poner en su sitio a sus socios; que sean ellos los que mediten un momento, a la vista del escenario que se les venia encima en el caso de nuevas elecciones. ¡Vaya! un «no me toquéis los h…. que mirad como os quedáis«. No iba con nosotros, los españolitos de a pie, ni con la oposición, ha ido con sus socios Junts, Esquerra, Bildu y PNV, y para todos los Norcoreanos aduladores, que hoy han vuelto a hacer el ridículo, con la chabacanería de dejar oír los gritos de júbilo en el sonido de fondo, mientras el superdotado daba la noticia de su vuelta al patio.
El escenario de nuevas elecciones para esta tropa sería regular, las vicepresidencias sin sueldo ni casas gratis, sin sueldecitos los asesores, hay que volver a coger el metro o el coche para ir a tu escaño a adorar a Dios sabe quién va a suceder al bicho; los independentistas relegados a la inutilidad en el congreso y senado, . . . ¿Cómo iban a dejar que dimitiese? le han ofrecido a Sánchez, bondad y sutileza en trato y declaraciones a partir de ahora.
Rotundamente le ha ganado el pulso a los socios, «el que no se ha cagado, ha manchado un poco».
¿A partir de ahora qué?, pues lo tiene más fácil, va a tener calladitos a los que le echaban valor llevándole la contraria en cositas, con la amenaza «me voy».
Este elemento no tiene vergüenza ninguna.