M. Recio. suiteinformación. Se afirma que es el oficio más antiguo del mundo desde la expulsión de Adan y Eva del Paraíso Terrenal. “La prostitución es la práctica de mantener relaciones sexuales con otras personas a cambio de dinero u otros beneficios económicos. Es ejercida mayoritariamente por mujeres, mientras que los clientes son mayoritariamente hombres. También existe, en menor medida, la prostitución masculina, donde los clientes también son generalmente varones”.
La RAE define así el término putero: “Hombre aficionado a las prostitutas”. Añade además un sinónimo a este término, cuál es el de “putañero” y también “prostituto”. Términos considerados vulgares todos ellos para calificar a los que practican con asiduidad esta, al parecer, incontrolable afición.
Recientemente las “sumadoras yolandistas” han puesto el grito en su cielo, ese que aún no han asaltado, pues van a proponer un decretazo para que los aficionados a la mujer de pago, sean señalados, expedientados y desproveídos de sus responsabilidades públicas.
Aplaudido el gesto por su aglutinador jefe, Sr. Sánchez , sin cortarse un pelo, va y suelta en su último hilarante discurso, que va a “promover el fin de la prostitución”.
Antes se acabará, aplicando remedios preventivos, con la neoplasia prostática intraepitelial en el varón, que con la prostitución.
La “prostitutio” romana deriva del término “prostituere”, cuyo significado es “ Exhibir para la venta”.
Ya en el Génesis bíblico se recoge esta profesión cuando Judá contrata los servicios sexuales de Tamar. Lo trata con la mayor naturalidad. Esa naturalidad es la que se viene observando en paralelo con los escándalos a los que nos tiene acostumbrado el partido, según ellos, de la honradez. Escándalo en el PSOE equivale a golfos con mucha pasta afanada, prostitutas y…. cocaina.
Llegan tarde los ofendiditos , genial calificativo, a intentar frenar e incluso acabar con la prostitución universal. De todo ello hubo en muchos de los casos aislados de corrupción sistémica que han supuesto un coste en detrimento de las arcas del Estado de unos ciento veinticinco mil millones de euros.
Calderilla al fin y al cabo, porque van a seguir con esta práctica cada vez que gobiernen y se les permita. Nuestra joven democracia adolece de un sistema de actuación inmediata ante los desmanes de quienes gobiernan. El lento Tribunal Supremo suele perder la carrera con los veloces políticos aforados.
Son más de cien causas judiciales, las que vienen a confirman la corrupción estructural del PSOE.
Lo prueban casos como el de los ERE, Tito Berni o Mediador, Faffe y el último al que llaman caso Koldo. Una encuesta reciente a nivel nacional, realizada por el INJUVE en el año 2020, aporta datos sorprendentes: un 10,6% de los jóvenes de entre 15 y 29 años reconoció haber consumido prostitución (el 4,8% más de una vez en su vida), el 3,9% de los chicos entre 25 y 29 respondió que lo había hecho más de una vez. España es uno de los tres países que más hacen uso de meretrices del mundo, moviendo más de cinco millones de euros al día.
Es mas fácil firmar con Puigdemont que terminar con la prostitución. Es cierto que no todos los socialistas corruptos consumen prostitución y cocaina, pues se da el caso de quienes sólo usan de uno de ellos. Pero la “trincadera” es de general regusto.
