REDACCION. Felipe de Jesús Estrada Ramírez. Diciembre 2021.-
El 18 de Diciembre pero de 1737;
Falleció Antonio Stradivari,
fabricante de los famosos
instrumentos de cuerda, violonchelos,
violas y los extraordinarios y únicos violines
Los Stradivarius, palabra proviene del apellido italiano de Antonio Stradivari, que vivió en la ciudad de Cremona, Italia, de 1644 a 1737. Stradivari era un luthier que se dedicaba a crear instrumentos de cuerda y su talento era tal, que no tardó en crearse fama como uno de los mejores artesanos de su tiempo y de todos los tiempos… Fue hijo de Alessandro Stradivari y Ana Moroni, fue aprendiz en el taller de Nicolò Amati. Este lutier italiano, más conocido por la forma latinizada de su nombre, Stradivarius, es sin duda el más célebre constructor de instrumentos de cuerda de la historia de la música. En 1683 se instaló por su cuenta en la Piazza San Domenico de Cremona, en el mismo edificio que su maestro, y pronto adquirió fama como creador de instrumentos musicales. Comenzó a mostrar originalidad y a hacer alteraciones en los modelos de violín de Amati. El arco fue mejorado, los espesores de la madera calculados más exactamente, el barniz más coloreado y la construcción del mástil mejorada. Sus instrumentos se reconocen por la inscripción en latín: Antonius Stradivarius Cremonensis anno… “Antonio Stradivari, de Cremona, hecho en el año…”.
Se considera en general que sus mejores violines fueron construidos entre 1683 y 1715, superando en calidad a los construidos entre 1725 y 1730. Después de 1730, muchos violines fueron firmados Sotto la Desciplina d’Antonio Stradivarius F. in Cremona [año], y fueron probablemente hechos por sus hijos, Omobono y Francesco. Además de violines, Stradivari construyó arpas, guitarras, violas y violoncellos, entre mil y mil cien instrumentos en total, según estimaciones recientes, de los cuales se conservan cerca de seiscientos cincuenta. Antonio Stradivari murió en Cremona el 18 de diciembre de 1737, y fue sepultado en esa misma ciudad.
Todos los instrumentos que elaboraba Stradivari estaban dotados de una belleza muy especial y acabados tan finos, que la calidad de los sonidos que desprendían era de lo más fina, alta y de máxima calidad… Actualmente, existen solamente dos colecciones exclusivas de Stradivarius que se conservan en lugares de libre acceso al público. Una de ellas se encuentra exhibida en la Biblioteca del Congreso de los Estados Unidosy la otra dentro de las Salas de Música de la Real Biblioteca del Palacio Real de Madrid. La fama que rodea a estos objetos tan especiales, es precedida por los costos en los que cada uno de ellos puede llegar a valorarse. Se sabe que la famosa casa de subastas Christie’s, en la ciudad de Nueva York, subastó un violín “Hammer” en $3,544, 000 millones de dólares. Hasta la fecha, esta es la suma más grande que se ha llegado a pagar por cualquier instrumento en una subasta de esta institución.
Otro caso que nos habla acerca del precio que se le puede otorgar a este tipo de violines, es el de la violinista norcoreana Min-Jin Kym. Ella, como propietaria de un instrumento Stradivarius, había sufrido una gran decepción al darse cuenta de que el mismo le había sido robado en el 2010. Sin embargo, poco tiempo después lo habían recuperado. El violín propiedad de la surcoreana se encuentra valuado en 2,5 millones de dólares.
Debido a la antigüedad de la que data cualquier instrumento Stradivarius, resulta sumamente valioso el hecho de ser propietario de uno de ellos. Lo que los vuelve tan especiales, es el barniz con el que están recubiertos se hacía por medio de una fórmula secreta, conocida y elaborada solamente por el luthier Stradivari. Otra es que ciertos insecticidas que solían utilizarse durante el siglo XVIII y que ayudaban a que la madera de los violines y otros objetos, se conservara en un estado excelente…
El violín con el nombre de “Lady Blunt” como fue bautizado debido a que Anne Blunt, mujer que fuera su propietaria durante tres décadas y conocida por su parentesco con el célebre Lord Byron, de quien era nieta. Durante el año 2011, este instrumento se subastó en la casa Tarisio, después de ser donado por la Nippon Music Foundation. Muchas personas aficionadas a la música asistieron a la subasta, que contaba con muy altas expectativas desde que se anunciara. Durante el evento, las cifras ofrecidas para hacerse con él fueron de lo más exhorbitantes. Finalmente se vendió en nada más y nada menos que 15, 9 millones de dólares. Esto es lo más que se ha pagado por un violín de esta clase en el mundo… Sin embargo el par de violines contenidos dentro de la colección llamada “Cuarteto Real”, comprada por el rey Carlos III, son considerados como los más valiosos que existen. Y es que al igual que el resto de los instrumentos del cuarteto, un violonchelo y una viola, cada uno de ellos ha sido valuado en un máximo de 30 millones de dólares…
