Un 19 de junio, pero de 1972
«El Niño de la Capea»
tomó la Alternativa…
L Aniversario
1972-2022
«La Tauromaquia
es la pasión que nos une…»
Hagamos de éste 2022
El año más Taurino
a pesar de las adversidades…
Felipe de Jesús Estrada Ramírez.
Cronista de la Ciudad…
(Bibliografía al final del texto)

Fue en la plaza «Vistalegre» de Bilbao su padrino fue el maestro Paco Camino y como testigo Francisco Rivera «Paquirri»; el toro del doctorado fue «Mireto», del hierro de Lisandro Sánchez, en esa tarde el Niño de la Capea logró cuajar una sensacional faena cortando las orejas de “Mireto”. La plaza Vista Alegre registró una entrada cercana a los tres cuartos en los tendidos y se celebró aquel día la tradicional corrida conmemorativa de la Liberación de Bilbao. En el toro de la ceremonia, el Niño de la Capea, hizo muy buena faena con la muleta Pedro Gutiérrez Moya realizó una muy buena faena y cuajó series muy bien rematadas. Y en la suerte suprema dejo la estocada en todo lo alto cortando las 2 orejas. Ante el cierraplaza y segundo de su lote, «El Niño de la Capea volvió a lucirse con la muleta, pero el toro vino a menos y tuvo que abreviar su valiente labor logró unos ayudados por alto con los que inició la faena de muleta y no pudo matar con la estocada en buen sitio utilizando 2 descabellos… Salió al tercio a agradecer los aplausos… Paquirri tocó pelo aquella tarde. Ante el tercero de las lidia ordinaria, inició bien con el capote al que saludó con una larga cambiada de rodillas… Cubrió con brillantez el segundo tercio al banderillear con gran facilidad. Cuajó gran faena ligando series de naturales. Colocó dos pinchazos bien señalados y una media. Cortó una oreja y Paco Camino, se fue de vacío… Pedro Gutiérrez Moya ha triunfado mucho en Vista Alegre ha hecho el paseíllo en 52 tardes: 3 novilladas sin caballos: 11 con caballos: 33 corridas de toros: y 4 festivales. Cortó 35 orejas: 16 en corridas: 10 como novillero con picadores y 5 en las novilladas sin caballos y toreó 4 Festivales. Abrió la Puerta Grande en 6 ocasiones y cortó las 2 orejas a 7 astados, entre toros y novillos. El triunfo en su Alternativa y salida en volandas, inició su consolidación exitosa como figura del toreo. La corrida fue televisada y fue muy importante para su carrera porque toda España vio a un torero que tomó la alternativa con una gran seriedad en Bilbao y con las cámaras de televisión presentes mostraron al Capea que podía llegar a ser figura del torero. Y no paró hasta conquistar Madrid y Sevilla, las dos primeras plazas del toreo… Tiene sus primeras oportunidades, en la plaza de toros de Vista Alegre de Madrid. “Siempre he pensado que Domingo Dominguín me puso en la primera novillada a través de recomendaciones, de amigos que se lo decían una y otra vez. Una vez que me puso en la primera, se convirtió en un partidario mío y todas las novilladas que dio de la oportunidad no solo en Vista Alegre, si no en todas las plazas que llevaba entonces Pontevedra, El Escorial, Cuenca, etc. En todas me anunció y me puso a hacer pareja con Roberto Piles” Niño de La Capea. Pero en la plaza que obtuvo los triunfos que lo consolidaron fue en la plaza de Vista Alegre de Bilbao, ahí tuvo las oportunidades de mostrarse como novillero, toreó 17 novilladas en Bilbao y fue la primera afición que lo apoyó y creyeron en él y fue la plaza donde tomó la alternativa…


Pedro Gutiérrez Moya “Niño de la Capea” en su trayectoria como figura del toreo en la Plaza de toros de Las Ventas ha toreado en 2 novilladas y en 39 corridas, de las que conquistó 22 orejas, abriendo la Puerta Grande en 5 ocasiones que son: En su Confirmación de Alterativa, con 3 orejas de los toros de la ganadería salmantina de Atanasio Fernández.
En la Corrida de Beneficencia de 1975, cortando 2 orejas de un toro de la ganadería de Sepúlveda de Yeltes y Los Bayones. En la Feria de San Isidro de 1979, corta las orejas de un toro del hierro de Baltasar Ibán: En la Feria de San Isidro de 1985 que cuajó la famosa faena al toro Cumbreño, de la ganadería de Manolo González y la Corrida de la Prensa del año de 1988, cuando mató en solitario la corrida de Victorino Martín cortando tres orejas y saliendo por la Puerta Grande y ganó en cuatro ocasiones el Capote de Paseo de la feria de Málaga.
Antes de dejar los ruedos y por su amor a su profesión se volvió ganadero de toro bravo. “Compré una ganadería desprestigiada en aquel momento, excluida de las ferias; pero una ganadería que tenía una base genética impresionante, que es lo que hoy en día más se echa en falta, un encaste puro. Y me lo tomé con mucha calma, me preocupé de estudiar con detenimiento lo que tenía y lo que podía hacer con ello. Tenía una gran fe en lo que había comprado. Hoy pienso que no me he equivocado, que el tiempo me ha dado la razón, que las teorías de los ganaderos antiguos son válidas ahora mismo y en un futuro, que lo que verdaderamente importa es tener una ganadería genéticamente pura para poder trabajar con ella”.
Ya desde novillero había dejado constancia de sus cualidades. Nacido en Salamanca el 17 de septiembre de 1952-2022 LXX Aniversario del Natalicio, de niño fue alumno de la Escuela Taurina La Capea, de ahí su sobrenombre. A la edad de 16 años, el 3 de mayo de 1969, debutó sin picadores en su ciudad natal y, su presentación con los del castoreño tuvo lugar el 17 de julio de 1970, en esa misma ciudad; un año más tarde pisó el ruedo de Las Ventas de Madrid.

Su confirmación en el coso de la calle Alcalá ocurrió un 21 de junio de 1974, siendo apadrinado por Sebastián Palomo Linares y de nuevo Paquirri fue el testigo. A lo largo de su carrera abrió cinco veces la puerta grande de Las Ventas, siendo la última en el año de 1988.
El Capea mantuvo siempre una interesante rivalidad con Julio Robles y José Mari Manzanares, con los que regaló tardes de buen toreo y de triunfos. El salmantino ocupó la punta del escalafón español durante los años 1973, 1975, 1976, 1978, 1979 y 1981.
Alternando con sus temporadas europeas, Pedro realizó campañas en América y se convirtió en uno de los toreros extranjeros más queridos en México durante la parte final del siglo XX, dejando su arte en muchas plazas de nuestra geografía nacional y ganándose el respeto y cariño de la afición.
Ahí quedará para el recuerdo aquella soberbia faena que cuajó en la Plaza México el 4 de mayo de 1986, cuando dibujó el toreo en una faena fenomenal ante el toro «Samurai», de la ganadería de Begoña, que a la postre fue premiado con el indulto por todas las virtudes que demostró en el redondel.
Todo ese cariño del público de México quedó de manifiesto una vez más la tarde del 5 de febrero de 1995, cuando partió plaza en la Monumental de Insurgentes para despedirse del público de nuestro país, en lo que fue un mano a mano con Manolo Mejía. Y así, entre lágrimas de emoción, tanto del torero como del público, le cortó las orejas y el rabo al toro «Piropo» de Pepe Garfias.
Se despidió de los ruedos de forma definitiva el 16 de abril de ese mismo año, en Málaga, tarde en la que le otorgó la alternativa a Javier Conde. Pese a estar en el retiro, El Capea ha toreado algunos festivales y el 5 de diciembre de 2004 volvió a efundarse el terno de luces para confirmarle la alternativa a su hijo, Pedro Gutiérrez Lorenzo, en la Plaza México.
Ahora como ganadero, propietario de los hierros de El Capea, San Pelayo y Carmen Lorenzo, continúan los triunfos, pues se posicionan dada la calidad que muestran los ejemplares lidiados y que han sido materia prima para triunfos de diestros y rejoneadores.
El Maestro Pedro Gutiérrez Moya en ruedos de España y Francia ha actuado en 88 novilladas con picadores y 1,227 corridas, ha triunfado en todas las ferias y plazas americanas de primera categoría. En Las Ventas ha toreado en 2 novilladas y en 39 corridas, de las que conquistó 22 orejas, abriendo la Puerta Grande en 5 ocasiones que son: En su Confirmación de Alterativa, con 3 orejas de los toros de la ganadería salmantina de Atanasio Fernández. En la Corrida de Beneficencia de 1975, cortando 2 orejas de un toro de la ganadería de Sepúlveda de Yeltes y Los Bayones. En la Feria de San Isidro de 1979, corta las orejas de un toro del hierro de Baltasar Ibán: En la Feria de San Isidro de 1985 que cuajó la famosa faena al toro Cumbreño, de la ganadería de Manolo González y la Corrida de la Prensa del año de 1988, cuando mató en solitario la corrida de Victorino Martín cortando tres orejas y saliendo por la Puerta Grande.
El Niño de la Capea
tiene un sitio relevante
en la Historia del Toreo…

